Mi labor como psicóloga

Mi labor como psicóloga es ofrecer un espacio terapéutico cercano, respetuoso y transformador, donde puedas volver a ti misma, sanar tus heridas y reconectar con tu fuerza interior.

No se trata solo de aliviar el malestar o resolver un síntoma puntual, sino de ofrecer un proceso que te permita explorar tu mundo interno, comprender lo que tu historia guarda y abrir la posibilidad de vivir con más claridad, autenticidad y paz.

Creo en la fuerza sanadora del encuentro humano, en el poder de la palabra compartida y en la sabiduría que cada persona lleva dentro. Mi labor es caminar a tu lado, recordándote que no estás sola, que tienes recursos internos más grandes de lo que imaginas y que el proceso terapéutico puede ser una oportunidad de regreso a tu centro y a tu paz.

No concibo la terapia únicamente como alivio del malestar, sino como un camino de autodescubrimiento y crecimiento. Mi mirada es integral y transpersonal, lo que significa que considero a la persona en su totalidad: mente, emociones, cuerpo y dimensión espiritual.

Áreas en las que te acompaño

• Autoestima y amor propio: aprender a valorarte, confiar en ti y cultivar una relación sana contigo misma.
• Duelo: transitar pérdidas de seres queridos, etapas vitales o proyectos, encontrando sostén y nuevos significados.
• Crisis vitales y transiciones: acompañarte cuando sientes que tu vida ya no encaja como antes y necesitas un nuevo rumbo.
• Depresión: sostener el peso del desánimo y el vacío interior, ofreciendo recursos para recuperar la esperanza y la energía vital.
• Ansiedad y malestar emocional: comprender lo que tu cuerpo y tu mente expresan, recuperar calma y equilibrio.
• Pareja y relaciones interpersonales: trabajar los vínculos desde la conciencia, mejorar la comunicación, sanar rupturas y construir relaciones más auténticas y respetuosas.
• Metas y propósito personal: reconectar con lo que da sentido a tu vida, honrando tu esencia y tu camino único.
• Bienestar y cuidado de la energía: reconocer tus ciclos, atender tu sensibilidad y cultivar prácticas que sostengan tu vitalidad. Autocuidado y límites sanos: integrar hábitos que nutran tu bienestar, aprender a decir “no” y a priorizarte sin culpa.
• Conexión con tu esencia: ir más allá de las máscaras y expectativas externas para vivir desde tu verdad y autenticidad.

Mi compromiso contigo consiste en caminar a tu lado, sostenerte en los momentos de dificultad y recordarte que dentro de ti ya existen la fortaleza y la claridad que necesitas.