“Existe algo más grande, más profundo y más sabio que opera en nosotros y que trasciende a la propia personalidad”

Desde muy joven sentí una gran sensibilidad hacia las personas y sus
emociones. Aunque en ese momento no comprendía del todo lo que
significaba, intuía que había algo en mí que me llevaba a escuchar, observar y
acompañar a los demás. Esa semilla interior me fue guiando, incluso cuando
en mis primeros pasos profesionales me orienté hacia otros caminos como el
mundo del marketing y la empresa.

Con el tiempo comprendí que lo que realmente me hacía vibrar era la
psicología. Por eso, decidí seguir mi intuición y formarme como psicóloga. A lo
largo de mi recorrido personal y académico, atravesé momentos de
inseguridad, de búsqueda de reconocimiento y también de vacío interior. Pero
fueron justamente esas experiencias las que me acercaron a lo que hoy
constituye el corazón de mi labor: acompañar a otras personas a atravesar
sus propios procesos vitales con conciencia, respeto y confianza en sí
mismas.

Mi formación en psicología se fue ampliando con un profundo interés en la
psicología transpersonal, el crecimiento espiritual y el trabajo con la mente y las
emociones desde una mirada integral. Me adentré en diferentes corrientes,
lecturas y prácticas –como Un Curso de Milagros– que me ayudaron a unir dos
dimensiones inseparables: la mente y el espíritu.

Hoy mi labor está enfocada en ofrecer un espacio de acompañamiento seguro
y cercano, donde cada persona pueda reconectar con su esencia, resignificar
sus experiencias y abrirse a nuevas formas de vivir. Trabajo especialmente con
mujeres en momentos de transición vital –crisis, duelos, rupturas, ansiedad,
búsquedas de propósito– y lo hago desde una mirada compasiva, humana y
profunda.

Creo firmemente que cada persona guarda en sí misma la capacidad de
transformarse y de volver a su centro, y mi misión es facilitar ese camino,
sosteniendo con herramientas terapéuticas, presencia y una visión integradora
de lo humano y lo espiritual.

Ser psicóloga y terapeuta ha sido una de las mejores decisiones de mi vida.

Y gracias a mi experiencia de vida que me condujo a una formación, hoy me faculta y me permite comprenderte mejor. Te acompaño en este maravilloso proceso que todos atravesamos, cada uno a su ritmo. Todo mi cariño.

 

Silvia Prats

La psicología, es un campo de conocimiento amplio, con mucha riqueza y numerosas aplicaciones en diversos ámbitos. Por este motivo, creo que es fundamental estar en constante formación y seguir aprendiendo cada día; para poder ofrecer lo mejor a los pacientes que vienen a consulta.

Actualmente compagino mi práctica clínica con el trabajo en empresa. A nivel personal, mi meta es vivir cada día con plenitud y serenidad.

Me gusta aprender, viajar, superarme constantemente, disfrutar de las pequeñas cosas, del arte, de la compañía de los animales, de la naturaleza y de las amistades.